Hablar de Malvinas
importa una responsabilidad de la escuela como trasmisora de la idea
de soberanía en las islas y de la historia.
No sólo es
indispensable volver a hablar de los homenajes, indudablemente
merecidos, a los caídos durante la guerra y a los que han vuelto
de ella sino que es necesario destacar que hasta 1982 todos los que
transitamos por las aulas teníamos en mente la frase “Las Malvinas
son argentinas”
Hubo un período de
silencio porque el tema aparecía mezclado, porque la guerra fue
llevada adelante por la última dictadura, que usó esta causa justa
en un período caracterizado por el uso del terrorismo de Estado.
Sin embargo,
paulatinamente de un tiempo a esta parte, con el advenimiento de la
democracia, el tema se fue retomando y hoy la escuela recupera la
responsabilidad que mencionaba al principio pero es necesario
adquirir un nueva visión de la cuestión Malvinas.
Hoy a treinta años de
la guerra, y a 179 años de la usurpación británica, la escuela
no sólo reafirma la idea que las Malvinas son argentinas, sino que
aparece como una causa que involucra a todos los países
latinoamericanos. Con lo cual se produce una ampliación de la visión
que hasta el momento nos acompañaba.
En el marco de la
perspectiva regional, constituye un capítulo central de la historia
de la emancipación americana que empezó hace dos siglos. En la
actualidad es un intento de países por borrar todo resabio del
colonialismo, y constituye un rechazo a toda clase de usurpación.
Obliga a repensar en
algunos principios como por ejemplo la autodeterminación de los
pueblos, y enfocar al mismo dentro de un Estado de Derecho, es
decir que este argumento no podría ser invocado por quienes
ingresan a un territorio que se encuentra completamente distante a su
geografía, usurpándolo , por mucho tiempo que prevalezca en él .
Obliga a pensar qué
va a pasar con nuestros recursos (hidrocarburos, pesca, minerales)
no sólo los propios de nuestra plataforma continental sino con la
reserva de agua dulce.
Obliga a pensar que
si Inglaterra mantiene la ocupación en Malvinas, tiene un pie
asentado en una posición estratégica envidiable.
Por otro lado todas
estas miradas son el terreno propicio para encontrar elementos de
cohesión e identificación colectiva y justamente éste es el
desafío: colocarnos en una posición reflexiva sobre la
pertenencia a un colectivo nacional, es decir ejercitar la
memoria en tema Malvinas, es un terreno propicio para pensar
quienes somos, qué recordamos, qué pasado común tenemos, qué
sucede en el presente en relación a ese pasado en común, y qué
porvenir imaginamos a partir de él.
Muchas Gracias.
Profesora Beatriz Cano
Directora CENS N°60
No hay comentarios:
Publicar un comentario